viernes, 13 de enero de 2017



Aprendí de las aves
un idioma de fe,
la verdad del vuelo.
En el baile de altura
sopla el aire a favor de mis alas
sobre un mar forrado de plata.

Profeso la luz del azul.
Vuelo sobre los valles del norte,
entre el viento del sur que ahora cantas.
Vuelo sobre el latido de tu patria,
mi patria,
entre ligeros acordes de vida en la distancia.

Vives a ciegas de toda amenaza.
En este plumaje que te ampara
ni la muerte,
mordaz barracuda con frío horror de daga,
alcanza su fama.

Vuelo a ras de los dioses,
entre brisas germinadas en soleada calma.
Vuelo dentro de ti,
y en tu aliento
me detengo.

0 comentarios: